Ahora que el hombre ha muerto,
ya puedo mirar a los cielos
y aunque sé que jamás escaparé de la necesidad
no obligaré a otra rata
a volver a la oscuridad
No, no volveré a las fábricas de los hombres
ni la belleza se escribirá con dolor
Mira lo que queda del mundo de los hombres;
una ruina
Seremos nosotras las que tendremos que construir la inmortalidad
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