miércoles, 31 de diciembre de 2014

El tiempo

Hoy he soñado con mi padre, que ya no existe, durante la siesta.
Ayer quedé con Juana. Una amiga. Tiene el pelo blanco.
Me desasosiegan los actores y los cantantes. Envejecen y mueren a una velocidad vertiginosa.

Los espíritus jóvenes en cuerpos desastrados.

Es inquietante  la facultad del tiempo.

martes, 30 de diciembre de 2014

La vida en la realidad

La rueda es cuadrada. Lo aprendí en la escuela.

Es hora pues de reírse de aquellos pobres hombres
que la sueñan redonda.





Ideas para futuras obras de teatro

Un personaje escapa de la ficción
y se adentra en la realidad.

Descubre que la realidad es la ficción,
y la ficción que había abandonado,

es la realidad.




Toda herramienta es valiosísima

Hombres barbudos y enanos deteniendo un tren
de residuos radiactivos a la entrada del gran Mandril.

Monos resucitando.

Manos que se iluminan por primera vez al amanecer.




Los propósitos

Y como todos los años, comienzo a escribir mis propósitos.
Son deseos, lo reconozco, absolutamente realizables.

Y sin embargo,  parece una carta a los reyes magos.

viernes, 26 de diciembre de 2014

Clarividencias

Fuerzas empujando en todas las direcciones y sentidos,
y tú mientras tanto revelando el futuro.

Lo viste, te anticipaste.
Lo dijiste alto.

Y como a todos,
te arrastró el presente a su velocidad de vértigo.



El mono que habla

Quiere escapar de su condición,
liberarse de las correas.

Dormir y despertar siendo él mismo.
Abrir los ojos y liberarse de las fuerzas
que le empujan a ser otro.

El mono habla, y a nadie le importan sus palabras.
Lo interesante del mono es que habla.

Y bebe cafés sin parar, adrenalina.





jueves, 25 de diciembre de 2014

Tragicomedia en el espacio

Cerrar los ojos, como hibernando.
Cerrar las fábricas, detenerlo todo.

Paralizar toda la aventura
y diálogo.
Parar en seco.

Salir de la órbita.

Recorrer mil  mundos,
como dormidos.

Despertar más allá de un largo viaje.
Despertar más viejos,
milerarios,

y volver a nuestros viejos asuntos de siempre,

de la guerra,
del abuso,
de la violación y el asesinato,

por hacer algo.











jueves, 18 de diciembre de 2014

I´m a rock de Paul Simon, por Dominguet

De acuerdo, quizá sea una roca, pero de madera.

No me crees. Lo entiendo, nunca has visto una roca a la deriva.
Permíteme, la carcajada es mía.

Los enamorados han tallado signos en mi piel, pues muy bien,
sé donde están. Mira mi rostro, me cubro de musgo y polvo.
No me queda tan mal.

Y mientras tanto, me aproximo con desgana
al mismo borde del mundo.

Es de risa, soy una roca.




Sabré que eres tú, porque no tendré miedo.

Desciendes sobre mi,
silenciosa,
en tu platillo volante de los años 50´

y me saludas desde lo alto.

"¿Te vienes a casa?
Está sin barrer y algo desordenada"

Abrimos una botella de vino.
Yo pierdo la vergüenza
y tú pierdes las bragas.

- "¡Qué mona eres!"
- "¡ Y tú un mono que habla!"

Me asombro de varias cosas;

- De tus ojos fosforescentes
- De que es imposible ocultar nada
- De tu mundo lejano
- Del compartir las mismas palabras

- De que te irás

- De que me gustan las marcianas.


Nihilismo de bolsillo

A nadie pediste nacer.
Así pues,
no tienes responsabilidad alguna.

Puedes matar a tus padres,
quemar templos,
dejar tu existencia a medias.

Lo único que te compromete con la vida
es aquel al que obligaste a nacer sin su permiso.

¿Eres Luna o eres Sol?

Hay noches que eres Luna blanca e inalcanzable.
Cadavérica.
Iluminando objetos monstruosos.

Nada es real.

Te separas cada vez más,
y yo,
aúllo como un loco.

A veces eres Sol.

Yo era el ciego al que devolviste la vista
después de tan negra noche.

Si me aproximo a ti, no puedo.
Es seguro que me abrasaré por el fuego.

Fantasía en Mandril

En primer lugar decir
que Nuestra Señora de la Renta Básica es real,
se puede tocar la mano. Déjate acariciar.

Que la tierra,
el agua,
los alimentos y los hidrocarburos,
serán de gestión conjunta, como el Danubio.

Que estamos en la linea,
en el mismo borde de lo posible y lo imposible
y lo irremediable.

Que se trata de esto,
o de no ser.

Que me oigan los niños del futuro:
¡yo estuve a favor de ustedes!

Digan lo que digan, nunca olviden esto,
Fantasía existe.


Dejar de ser otro



He pasado de cuerpo en cuerpo
sin conseguir escapar de mi condición.

Esa condición,
un plano inclinado donde resbalar.
Ese hilo que nunca que se rompe y que me lleva a mirar a los ojos
de mis antepasados, los muertos.
Esclavos que murieron sin dejar de serlo.

Arrastrado por las procelosas corrientes del mundo líquido,
no sé donde acabaré,
ni en que cuerpo despertaré.

En otro, sin duda.
En otro cuerpo cayendo.

A saber quién soy yo, a estas alturas de la vida.
Quizá un mono que habla desde una prisión.

Pero puedo consolarme cerrando los ojos

Dormir.
Esperanza de ser algún día yo.

Romper el hilo que nunca se rompe.




viernes, 12 de diciembre de 2014

En el país de los zombis

Se me abren las puertas del país de los zombis.
No recuerdo cómo llegué hasta aquí.

Los zombis,
que se me aproximan para jugar conmigo,
ni siquiera saben que han muerto.
Hablo en voz baja. No sé que decir.
Ese temor al despertar en un cuerpo que  no es el mío.

Me invitan.
Me acicalan.
Salimos todas las noches
para poder dormir,

la necesidad de estar vivos, como sea,
con nuestros rostros cadavéricos
y pena,
nos dejamos arrastrar en tumultuoso desenfreno.

Esa risa casi desesperada,
como el llanto de un niño al que nadie asiste.

jueves, 11 de diciembre de 2014

Si llegaran los OVNIs

Si llegaran los OVNIs para rescatarnos
justo a tiempo,
ahora que se han superado todos los límites,

veríamos a lo lejos el mundo en llamas.

Un consuelo para ir devastando, mientras tanto, lo vivo.

Porque si llegaran los OVNIs
tan solo encontrarían una tierra yerma,
y quizá un árbol.

Ese árbol que me dio por plantar el día antes del fin del mundo.



La vida

Me preocupan los problemas,
la pobreza.
Años sin Sol, por ejemplo.

Me preocupa la demencia,
la locura,
las tristes horas de encontrarse en el mundo solo.

Me preocupa la visión de la vida
alejándose
del gran banquete.

Si Nuestra Señora de la Renta Básica se me apareciera, conocería a Carmen Jodra.

Si Nuestra Señora de la Renta Básica
llegara algún día,

leería tus poemas en el parque, si me apeteciera, bajo el sol del invierno.

Podría descubrirte en la biblioteca,
o tras la cristalera de la  cafetería, bajo la forma de tumultuosos cuerpos emponderados,

en vez de en el metro, cansado.

En vez de en la noche, cansado.

Me adueñaría del tiempo para escucharte en recitales de barrio y en bares,
y me encontraría contigo,


y volvería a casa corriendo para escribir poesía.


En el recital de poesía

Y no sé por qué hablé,
no sé por qué dije que estaba de acuerdo con las subvenciones a los poetas.

Entonces sucedió.
Empecé a tartamudear.
Ni siquiera me salían las palabras.

Perdí el control de la mirada,
 como siempre,
cayeron los papeles al suelo.

La interrumpí.

Era muy guapa.

domingo, 7 de diciembre de 2014

Visión de Nuestra Señora de la Renta Básica


Es raro,
somos muchos los que todos los días te vemos.

Hombres de corazón limpio,
esclavos que dejarán de serlo,
ancianos,

todos empujados hacia la cuneta,
cansados de escuchar la misma retahíla de siempre,

de que no existes,
de tu imposible,
de que bajo tu rostro amable hay escondido un loco.

Y sin embargo apareciste inesperadamente, al caer la noche,
cuando todo estaba perdido,

entregándote a cada cual, sin ningún tipo de vergüenza,
acariciando suavemente nuestra frente,

liberando todas las potencialidades.

Desde que llegaste,
las caídas son siempre suaves.










viernes, 5 de diciembre de 2014

La pequeña alegría

Una carta,
un compañero al caer la noche que me entrega un túper con comida.
Un libro de poesía catalana que encuentro sin querer, entre miles,
en la Cuesta de Moyano.

Pequeñas alegrías.

Y tú y él esperándome a las puertas de la Renta Básica.

El mundo es un problema ¿Te vienes a merendar conmigo?
Sé como resolver el Todo, pero se dificulta el mañana.

Enciendo la estufa sin oir el clin clin de las monedas cayendo en el invierno.







Ya ha alcanzado mi cuerpo
y me desgasta, emponzoñando los futuros.

Ya es hora de ser un hombre,
antes de que sea demasiado tarde,

para lanzar rayos,
salvar nubes,
romper diques que aíslan los cielos,

y que una fina lluvia caiga y atraviese el mundo.
En este estado de optimismo,
de alegría,
de poseer un segundo más de vida.
Acaricio las paredes. Está viva.

Ya no hay fronteras entre las calles y la casa.
En ambos he de sentirme libre y seguro.

No hay razones para que el suelo desaparezca bajo mis pies,
ni riesgo de resbalar hacia el vacío.

Bajo el volumen de la música
-me envuelvo en las sábanas
como entre la hojarasca-

Me quedo solo con los latidos del enorme corazón