miércoles, 19 de agosto de 2015

Oh, dioses

Oh, dioses, creíais que os ibais a reír de mí, otra vez,
y he sido yo el que me reído de vosotros.

Me invitáis a lo egocéntrico como al resto de los hombres
de mirada rígida y prosodia llana,

pero algún problema en mi desarrollo me dotó de millones de células espejo,
ay, que cosa es esta la empatía,
la imaginación procaz
y fabulosa,

siempre viviendo al borde del infarto,

lo diminuto es siempre una aventura.

Ay dioses, que me querías convertir en turista,
enviarme lejos del mundo fantástico que es mi tierra,
arrojar mi cuaderno al suelo,
morirme todos los días,
acabar distraído, sin saber quién soy, todo en almíbar.


Y sin embargo, esta vez he sido yo el que me he reído de vosotros,

aunque espero vuestro rayo.







No hay comentarios:

Publicar un comentario